Mientras algunas familias eligen guardapolvos y recorren librerías en busca de las últimas compras antes del inicio de clases, miles de padres y madres tienen otra prioridad: conseguirles a sus hijos una escuela donde puedan empezar las clases el 1° de marzo. Es que según surge de información judicial, de datos aportados por colectivos de padres damnificados y del propio Gobierno de la Ciudad, son más de 11 mil las vacantes que faltan en el distrito.

Patricia Pines es docente, madre y una de las referentes del colectivo “Vacantes para tod@s en las escuelas públicas”, organización conformada en 2014 como respuesta y rechazo al sistema de inscripción en línea que estableció el entonces ministro de Educación de la Ciudad de Buenos Aires, Esteban Bullrich. Desde esta organización advirtieron desde hace un tiempo que el problema de la falta de vacantes, lejos de mejorar, está empeorando. “Estimamos a la fecha que son alrededor de 12 mil los niños y niñas sin vacantes en la ciudad. La situación más preocupante se da en el nivel inicial, donde son alrededor de 10.500 chicos los que están afuera del sistema”, sostiene Pines. Los números coinciden con lo comunicado por el Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires a la Legislatura porteña, cuando en un informe presentado reconoció que se quedaron sin vacantes 10.665 chicos del nivel inicial, 439 de nivel primario y 328 en la secundaria.

    Ivana Sniechowsky es madre de un niño de 2 años al que no pudo inscribir en la escuela pública en 2018. “Desde el año pasado que mi hijo no tiene vacante. Con mi marido trabajamos ocho horas por día y no tenemos con quien dejarlo para que lo cuide”, comenta. Aunque presentó un recurso de amparo ante la justicia, admite que no encontró muchas alternativas para su caso: “No nos quedó otra opción que pagar la escuela privada que nos sale $ 6600 por mes”.
La catarata de reclamos y de padres y madres en estado de alerta ante la falta de lugar para sus hijos e hijas produjo una estrategia judicial común. “Contamos con un grupo de abogados que está trabajando en la presentación de amparos para que se atienda la situación de los chicos y chicas sin vacantes. Tenemos en curso alrededor de 200 amparos. Ante la falta de respuesta del Gobierno de la Ciudad la única vía que nos quedó es la judicial”, reconoce Patricia Pines.

Sobre la situación del alumnado que queda fuera del sistema público, la referente de “Vacantes para tod@s en las escuelas públicas” agrega: “La realidad es que el que puede pagar termina en la escuela privada. Estamos ante un plan sistemático que busca la reducción de la matrícula en la escuela pública y vuelve cada vez más grande la brecha social entre quienes pueden acceder a una escuela y quienes no”.

El 10 de marzo de 17 a 20 se realizará un “Festival en defensa de la Educación Pública” en la plazoleta ubicada en Holmberg y Rivera, en el barrio de Villa Urquiza, para pedir por la refacción de la Escuela N° 24 “Francisco Morazán”, la apertura de una escuela infantil de 45 días a 5 años con jornada extendida y la reapertura de las salas cerradas en la Escuela José Mármol del barrio de Villa Ortúzar.