El gobierno de Horacio Rodríguez Larreta entra en horas críticas, en busca de soluciones que permitan bajar la cantidad de contagios de coronavirus en la ciudad de Buenos Aires.

Durante semanas, el gobierno porteño no acompañó las medidas restrictivas aplicadas tanto en el territorio bonaerense como a nivel nacional. Sin embargo, esta vez habría acuerdo con el gobernador Axel Kicillof y estarían encaminadas las negociaciones para acordar una serie de medidas comunes para AMBA.

En este momento,  Larreta estudia medidas contundentes para la Capital que implicarían un fuerte cambio con respecto a la situación actual. Un foco clave está puesto en las reuniones sociales. Está en estudio una medida de altísimo impacto que sería un confinamiento total durante los fines de semana y mayores controles para evitar aglomeraciones en el espacio público.

Las siguientes son las medidas principales que se estudian para la próxima etapa:

Fines de semana: en el gobierno porteño se analiza la posibilidad de un confinamiento los sábados y domingos, días en los que se vuelva a una suerte de fase 1. Eso implicaría un cierre total de comercios, con la única excepción de los esenciales (alimentación y farmacias, principalmente).

Educación: el gobierno nacional prevé que se mantenga la prohibición vigente para las clases presenciales en los distritos en alerta epidemiológica, donde incluye a la ciudad de Buenos Aires y el conurbano. Larreta, que había apelado a la Corte Suprema para incumplir con esas medidas, ahora analiza ser más restrictivo.

“Estaremos muy atentos estos días. Si la tendencia al ascenso continua, creemos que tenemos que dialogar sobre otras medidas para evitar que continúen ascendiendo. Si los casos no bajan en las próximas 72 horas, entonces acompañaremos las medidas de la Nación”, dijo el ministro de Salud porteño, Fernán Quirós.

Circulación nocturna: se analizan la posibilidad de extender los días de semana una hora más la restricción de circulación vigente. Sería de 19 a 6, aunque no está del todo claro.

Gastronomía: habrá más controles para garantizar que la atención en bares y restaurantes se restringe a las mesas en el exterior. Hoy muchos establecimientos no lo cumplen. Si se aprobara el cierre de fin de semana sería un golpe duro para el sector gastronómico, ya que esos días hacen su mayor diferencia en caja. En principio solo se les permitiría atender en modalidad de delivery o “take away”.

Comercios: los shoppings y centros comerciales seguirán cerrados, al igual que los bingos y discotecas. Se estudia limitar aún más el horario durante los días de semana. Hoy pueden atender de 9 a 19. Se analiza permitirles atender de 12 a 18.

Parques y plazas: se cerrarán los patios de juegos infantiles. La intención es evitar aglomeraciones y reuniones sociales con protocolos laxos en esos espacios. Se reforzará la vigilancia con personal de la Ciudad, con la intención de asegurar el uso de barbijos y la distancia social.

Reuniones en casas particulares: las actividades y reuniones sociales en domicilios particulares están prohibidas y así seguirán. Se busca alguna forma de pedir asistencia a los porteros de edificios para que ayuden a cumplir esa restricción.

Transporte público: como hasta ahora, en el AMBA solo podrán usar colectivos, trenes y subtes aquellas personas que se dedican a actividades consideradas esenciales. La intención es sumar controles para que esto se cumpla.

Actividades sociales, culturales y religiosas: en los lugares de alto riesgo seguirán suspendidas las actividades de casinos, bingos, discotecas y salones de fiestas; la realización de todo tipo de eventos culturales, sociales, recreativos y religiosos en lugares cerrados que impliquen concurrencia de personas; y la actividad en cines, teatros, clubes, gimnasios, centros culturales y otros establecimientos afines, salvo que funcionen al aire libre.

Deportes: seguirían prohibidos en lugares cerrados (gimnasios, canchas techadas) y habrá limitaciones cuando se ejerciten al aire libre: solo se permitirán deportes individuales, que no sean de contacto.

Empleadas domésticas: todavía no está claro si se impondrá alguna restricción a su trabajo. La intención es no innovar en este aspecto, lo mismo que con las personas dedicadas al cuidado de niños y personas mayores.

Fuente: La Nación