El presidente del Palacio capitalino y ministro de Seguridad de la Ciudad, dio la orden para que durante la apertura de sesión, que dura alrededor de 5 minutos, las puertas que dan a hacia las gradas donde se ubica el público general y los periodistas estén bloqueadas.

Al parecer nunca antes había sucedido un caso similar en la Legislatura porteña.

Lo cierto es que Santilli no quería que los feriantes de San Telmo, que fueron reprimidos el último fin de semana, presentes en la Legislatura porteña para repudiar el aval de los funcionarios sobre el accionar policial, lo escracharan.

Es que el titular de la cartera de seguridad de la Ciudad salió a bancar el accionar policial en ese barrio porteño.“Si quieren pegarle a una persona, a un policía o ser violentos, en la Ciudad de Buenos Aires no. Hay un fiscal investigando todo, nosotros vamos a cumplir con lo que dice la Justicia”, había dicho Santilli. Y concluyó como argumento que “hay que inculcar el respeto al Espacio Público”.

Apenas terminó el protocolo (izamiento de la bandera,  y la  aprobación de los asuntos de Actas de sesión y sobre los expedientes ingresados y modificaciones a los giros publicados en labor parlamentaria que se votan a mano alzada) Santilli abandonó el recinto y quedó a cargo de la sesión el vicepresidente I Francisco Quintana..

Fuente: Revista Que