El predio ferial "El Dorrego", del barrio de Colegiales, fue subastado esta mañana en el Banco Ciudad, en apenas 10 minutos, y la empresa Sancor Cooperativa se lo adjudicó al ofertar 20.100.000 dólares, 5 millones más que el precio fijado para la base del remate.

El nuevo informe de OUBA, "Promesas sin techo, Problemas de acceso a la vivienda en la Ciudad de Buenos Aires" señaló: "Una política urbana que antepone garantizar los negocios inmobiliarios por sobre las iniciativas que necesitan implementarse para revertir el déficit habitacional, de equipamiento y espacios verdes que se registra en numerosas áreas de la ciudad", dijo Luis Baer, investigador del Instituto de Geografía en la Facultad de Filosofía y Letras (UBA) en ese documento de Observatorio Universitario de Buenos Aires.

"En este contexto, la subasta masiva de inmuebles públicos que viene produciéndose en la CABA hace ya más de tres años, supone una estrategia que, además de desatender las principales prioridades socio-urbanas, desperdicia una valiosa oportunidad de gestión sobre un bien que es estratégico, escaso e irreproducible: el suelo urbano bien localizado", agregó.

Las gestiones urbanas exitosas tuvieron otros destinos para este recurso estratégico e incluso desarrollan acciones conducentes a la ampliación del patrimonio inmobiliario público. No sólo mediante mecanismos que presionan sobre el erario fiscal (como la compra directa y la expropiación), sino también mediante modalidades de adquisición inteligentes que no afectan el presupuesto del Estado: por ejemplo, aceptar el pago de acrecidos fiscales y multas con suelo, afectar vivienda construida en el marco de operatorias urbanísticas público-privadas y facilitar el cobro de “plusvalías urbanas” con bienes inmuebles.

En concreto, con el argumento de obtener fondos para la construcción de infraestructura se llevó a cabo, a través de la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE), un proceso de subastas compulsivo, de enajenación, de alrededor de 60 inmuebles de propiedad pública nacional.

"Entre los inmuebles que iniciaron procesos de subasta pública, se destacan dos grandes grupos: inmuebles individuales (lotes baldíos, departamentos, casas y edificios en block) y grandes lotes para desarrollo de proyectos urbanos en sectores estratégicos de la ciudad con una normativa urbana especial que fija una morfología y constructibilidad distinta a su entorno barrial inmediato y a los
lineamientos del recientemente aprobado Código Urbanístico", explicó Paloma Garay Santaló, investigadora del Instituto de Geografía (UBA).

Los nuevos proyectos urbanos en tierras del Estado Nacional se generan en los predios ferroviarios de la estación Colegiales, Palermo, Villa Urquiza y Retiro (sobre la Avenida del Libertador), con una fuerte correspondencia con las áreas de mayor valorización del suelo. Además, se generó un conjunto de nueve nuevos lotes linderos al área de oficinas de Catalinas Norte (liberada de uso ferroviario por levantamiento de vías), y otro predio para oficinas en Catalinas Sur. Estos dos últimos se materializan como cabeceras del Paseo del Bajo.

Entre las tierras en proceso de enajenación que son propiedad del Gobierno de la Ciudad, se destaca el predio vecino donde funciona el CENARD, frenado por la campaña electoral de este año pero, en carpeta de las autoridades si son reelectas.