Hace tres semanas, María Belén Ludueña se fue de Buenos días América, el noticiero de América que conducía con Antonio Laje. “No me podía ir sin llorar porque yo realmente soy así, soy muy sensible. Este es mi último día, con sensaciones encontradas”, dijo entre lágrimas, con la poca potencia de voz que le quedaba por el nudo en la garganta.

En el medio, Laje se metió para quitarle dramatismo al tema. Remarcó que tan solo eran vacaciones adelantadas que le había pedido el canal. Incluso, agregó que el año que viene va a seguir en el mismo estudio, pero en otro horario. Ahí ella lo frenó para decir que eso no era tan así.

Desde entonces a esta parte, y luego de que Ángel de Brito tirara la primera piedra y hablara de maltrato laboral, varias excompañeras del noticiero salieron a hablar. A remarcar sus padecimientos por lo que Antonio prefirió definir como “rigurosidad”.

Si bien hasta el momento Ludueña no había dicho nada sobre el tema, ante lo que se generó, tocó el tema en una charla con la revista Hola. Explicó que lo que vivió la mañana en la que se despidió muchos notaron que llanto tenía escondido algo más que el final de un ciclo.  

Luego de explicar cuestiones a su casamiento con Jorge Macri, no esquivó las preguntas vinculadas a su tema laboral. “Creo en la exigencia, pero hay formas y formas. La gente pudo darse cuenta del porqué de mi tristeza al aire”.

Fuente: Pronto.com.ar