Tras la derrota 2 a 1 frente a Arabia Saudita en el debut mundialista de la Selección argentina, el capitán del plantel, Lionel Messi, analizó lo que pasó en el enfrentamiento inicial por la Copa del Mundo en Qatar. “No hay excusas”, aseveró el diez, que anotó el primer y único gol del plantel que conduce Lionel Scaloni, y hacia adelante indicó: “Habrá que demostrar que somos un grupo de verdad”.

El rosarino que juega en el PSG contó que en el Seleccionado sabían que se enfrentaban a un equipo con “buenos jugadores”, que “movía bien la pelota” y adelantaba la línea. “Lo habíamos trabajado, por eso tuvimos muchas situaciones de goles que nos anularon. Quizás no encontrábamos el momento justo para no caer en la trampa, ellos hacen muy bien tirar la línea y pararse”, sostuvo Messi en cuanto al juego del rival, durante una conferencia de prensa posterior al partido.

Sin embargo, asumió el mal desempeño del plantel cuando le consultaron por la injerencia que tuvo en el resultado el sistema de VAR semiautomático que se utiliza en Doha, luego de que a la Argentina le anularan tres goles. “Se dicen tantas cosas del VAR; hoy se dio así y ya está, no hay excusas”, indicó.

Y entonces hizo énfasis en la unión que deben tener los jugadores de cara a los próximos enfrentamientos del grupo, contra México y Polonia -que entre ellos se enfrentarán hoy a las 13-. “[Tenemos que estar] más unidos que nunca. Este grupo, como viene demostrando, es fuerte de esa manera y ahora más que nunca”, marcó el capitán. “Es una situación que nunca nos tocó vivir con nuestro grupo, hace mucho que no nos tocaba pasar un golpe tan duro. Habrá que demostrar que somos un grupo de verdad”, dijo, después de que la Argentina perdiera su invicto de de 36 partidos.

“Es un golpe muy duro para todos, no esperábamos empezar de esta manera, estábamos confiados de que íbamos a ganar, pero por algo pasan las cosas. Hay que esperar lo que viene, tenemos que ganar o ganar ahora, depende de nosotros y sí, hay que ganar”, sostuvo y siguió: “Es el primer partido y depende de nosotros ya corregir lo que hicimos mal, intentar volver a la base de lo que somos”.

Entonces, el capitán de la Selección aceptó que los jugadores están “dolidos” por el resultado desfavorable y habló de una “amargura muy grande”.

Asimismo respondió sobre cómo se encuentra físicamente al no haber mostrado un rendimiento alto como se esperaba en este primer partido. “Está bien”, contó sobre su tobillo en medio de versiones sobre un posible malestar.

Fuente: La Nación