Otra muerte sacude al periodismo deportivo argentino: Falleció la eminencia y uno de los mejores comentaristas en la historia radial argentina, Mario Trucco

Falleció una eminencia del periodismo deportivo argentino como Mario Trucco, quien edificó una trayectoria de siete décadas en la que se destacan coberturas de eventos de primer nivel internacional y el haber sido la voz de la emblemática Cabalgata Deportiva Gillete. A sus 92 años se despidió el comunicador marplatense que dejó su sello y su legado es un emblema de la profesión. Arrancó desde muy chico y forjó una carrera prestigiosa. Es considerado uno de los mejores comentaristas en la historia de la radiofonía argentina.

Trucco nació el 20 de diciembre de 1930 y trabajó en los Juegos Olímpicos de Roma 1960 y en la Copa de las Naciones 1964 disputada en Brasil, que junto al seleccionado local, por entonces bicampeón mundial liderado por Pelé, se sumaron el Portugal de Eusebio, la Inglaterra de Bobby Moore y Bobby Charlton, y la Argentina de Luis Artime, Daniel Willington y Antonio Rattín, que fue campeona.

Comenzó a desempañarse en el periodismo siendo un adolescente de 17 años en diarios locales como El Trabajo y La Mañana, donde se desempeñó haciendo correcciones y llegó a ser jefe de redacción. En su ciudad también trabajó en LU9 Radio Mar del Plata.

Luego de 15 años emigró a Buenos Aires, según cuenta el diario La Capital de su ciudad. Fue convocado por Fioravanti (Joaquín Carballo Serantes) para trabajar en Buenos Aires en 1967 y fue comentarista suyo y de otros importantes relatores como Yiyo Arangio, Miguel Angel de Renzis, Jorge Bullrich o Gustavo Vergara. En la radiofonía porteña trabajó en Rivadavia, Belgrano, Del Plata y Libertad.

También comentó los partidos en los Mundiales de Argentina 1978, España 1982 y México 1986. Trabajó con José María Muñoz, Juan Carlos Morales y Víctor Hugo Morales.

Además, cumplió el rol de columnista en programas de interés general, ya que siempre lo atrapó la historia y su formación lo llevó a poder manejar diversos temas. Su claridad, buen léxico y dicción lo distinguieron en su profesión.

En Mar del Plata lo consideran un embajador y editó dos libros. El primero “Mi pueblo se llama Mar del Plata” y en 2018, al cumplir 70 años de periodismo, publicó el segundo, “El Deporte y la vida”, que relata su extensa y prestigiosa trayectoria. Allí están incluidas historias basadas en coberturas de fútbol, boxeo y distintos temas. Encuentros con referentes deportivos, artísticos y anécdotas de su vida personal desde su infancia.

Fue socio vitalicio y honorario del Círculo de Periodistas Deportivos de Mar del Plata. En 1993 se le entregó el “Lobo de mar al deporte y la cultura”, como comunicador social. En 1997 fue galardonado con el premio anual del Instituto Superior Deportea “Al maestro con cariño”. En 1998 el Concejo Deliberante marplatense lo nombró Ciudadano Ilustre. Una de las cabinas del Estadio José María Minella lleva su nombre. En 2004 fue el primero en recibir en premio “Manuel Álvarez Argüelles” que lograron otros referentes históricos de la radio como Magdalena Ruiz Guiñazú. También el “Lobo de mar al deporte y la cultura”, en el año 2016, por su gran labor como periodista deportivo.

Fuente: Infobae.com