Los ciudadanos argentinos evacuados en Wuhan, China, donde se encontraban aislados desde el brote del virus Covid-19, arribaron este viernes a Ucrania y el micro que los trasladaba fue apedreado. Permanecerán en cuarentena durante dos semanas.

En el avión, facilitado por el gobierno de Ucrania, viajaron 45 ciudadanos ucranianos y 27 extranjeros (de Argentina, Ecuador, República Dominicana, El Salvador, Costa Rica, Montenegro, Panamá e Israel), además de los 22 miembros de la tripulación y el personal médico acompañante. El mismo aterrizó en el aeropuerto internacional de Boryspil, cercano a la ciudad de Kiev.

Los evacuados realizaron un transbordo en la ciudad de Kharkiv, para después ser trasladados a un centro médico perteneciente a la Guardia Nacional de Ucrania, situado en la región de Poltava. Residentes locales recibieron la comitiva a piedrazos, se enfrentaron con la policía y hubo diez heridos.

Después de 3 horas de incidentes, los autobuses con los afectados finalmente pudieron llegar al lugar designado para la cuarentena. Los evacuados, con barbijos, se asomaron por las ventanas de los autobuses mientras estos se movían lentamente bajo una gran escolta policial. El ministro, Arsen Avakov, visitó el lugar de las protestas para intentar calmar a los reunidos.

Los evacuados estarán en cuarentena dos semanas, bajo estrictas medidas de seguridad sanitaria, y monitoreados con controles médicos y epidemiológicos periódicos, según las autoridades ucranianas. Tanto antes del abordaje como durante el vuelo, y una vez arribados, debieron realizarse estrictos controles médicos, cuyos resultados fueron favorables y confirmaron una vez más que no están infectados.

La Cancillería argentina destaca en su comunicado que "el gobierno de Ucrania confirmó hoy que todos los evacuados no presentan síntomas y están sanos", y reiteró su agradecimiento "a Ucrania por su generosidad y a China por su colaboración en esta inestimable acción".

En Wuhan permanecen todavía un argentino con su esposa de nacionalidad china y sus dos hijos que tienen ciudadanía argentina, y otros dos cónyuges chinos de argentinos que viajaron a Ucrania (una mujer y un hombre) debido a que el gobierno de ese país limitó temporalmente el ingreso de ciudadanos chinos, aún si tuvieran vínculos con ucranianos.

Por su parte, los siete argentinos que siguen a bordo del crucero Diamond Princess, en Japón, esperan desembarcar tras dar sus test negativos, en el marco de intensas gestiones que hace la embajada argentina en el país asiático."Estamos pidiendo que los desembarquen tras el resultado negativo del test.

Fuente: Minuto Uno