Según informaron autoridades oficiales, el país vecino superó ayer la barrera de los 1,8 millones de casos confirmados y de 70.000 muertes por la enfermedad.

Brasil, es el segundo país más afectado por el nuevo coronavirus en el mundo. Tan solo en las últimas 24 horas contabilizó 45.048 infecciones y 1.214 muertes, según el Consejo Nacional de Secretarías de Salud (Conass) y el Ministerio de Salud.

Brasil reportó por tercer día consecutivo más de 40.000 contagios y puso en jaque el sistema sanitario de cinco capitales, cuyas unidades de terapia intensiva están cerca del colapso, según el Correio Braziliense.

Se trata de las terapias de Cuiabá y Florianópolis -centro-sur del país, donde la situación es crítica-, Curitiba, Natal y Belo Horizonte, cuya ocupación supera el 90%.

Pese a que la curva de contagios aún no se desaceleró, varios estados y ciudades, entre ellas San Pablo y Río de Janeiro, llevan adelante desde el mes pasado procesos de salida gradual de la cuarentena.

Igual que Estados Unidos -el único país que tiene más casos y más muertes-, Brasil vive una pulseada política por las medidas de prevención que enfrenta al presidente Jair Bolsonaro, opuesto a ellas, con numerosos gobernadores y alcaldes.

Pero al revés de Estados Unidos, donde la economía comenzó a recuperarse el mes pasado a partir de la reapertura de actividades, en Brasil los indicadores siguen hundiéndose, como volvió a reflejarlo el pasado jueves un reporte de la Confederación Nacional de la Industria (CNI), según el cual los ingresos de las empresas exportadoras se redujeron 57% entre abril y mayo pasados.

Fuente: https://www.cronica.com.ar/