El 1 de abril un grupo de cazadores ingresó al parque Krueger de manera ilegal, para efectuar la caza de una de las especies en vía de extinción, el rinoceronte.

Según testimonios, un elefante atacó y mató a uno de los cazadores. El resto del grupo escapó del lugar y dio aviso a un familiar del fallecido sobre lo acontecido, quien hizo la denuncia a la policía.

Los guardaparques del Parque Kruger buscaron sin éxito al hombre. Hace apenas cuatro días, precisamente el 4 de abril, un grupo de policías y guardabosques halló los restos del cazador. Los indicios apuntan a que “una manada de leones devoró los restos dejando solo un cráneo humano y un par de pantalones", dijo Isaac Phaahla, gerente general de comunicaciones del Parque Nacional Kruger.

La caza tuvo un final paradójico, un cazador cazado y otros tres arrestados y acusados ​​de posesión de armas de fuego sin licencia, conspiración para la caza furtiva y entrada ilegal al parque Kruger.

Fuente: Página 12