Caleb Wallace, el líder del movimiento antibarbijos que encabezó protestas contra las medidas preventivas impuestas durante la pandemia en Estados Unidos, falleció el sábado por Covid-19, tras permanecer hospitalizado casi un mes.

Su esposa, Jessica, confirmó este lunes el fallecimiento de Wallace, quien estuvo al frente del grupo Defensores de la Libertad, que rechazaba el uso de cubrebocas y el confinamiento en Texas.

“Caleb falleció en paz. Él vivirá para siempre en nuestros corazones y mentes. No era perfecto, pero amaba a su familia y a sus hijas más que nada”, indicó la mujer en una publicación en GoFundMe, un sitio web donde había estado recaudando dinero durante las últimas semanas para cubrir los costos médicos de la internación.

Jessica, quien está embarazada del cuarto hijo del matrimonio, dijo recientemente que la salud de su marido estaba empeorando y que los médicos se habían quedado sin opciones de tratamiento. El sábado, lo trasladaron al Centro Médico Shannon en la ciudad de San Angelo para que su familia pudiera despedirse.

Wallace contó que, ante los primeros síntomas, su esposo decidió tomar una mezcla de vitamina C, zinc, aspirina e ivermectina, un medicamento que se usa para tratar los parásitos, y que se promocionó como un tratamiento para el coronavirus, pese a que recientemente fue contraindicado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) por sus efectos nocivos en humanos.

Caleb fue tan persistente en su oposición a las medidas sanitarias para enfrentar la pandemia que se negó a realizarse una prueba cuando comenzó a sentirse enfermo, el 26 de julio pasado. “En un inicio, también se opuso a ir al hospital”, reveló su esposa al New York Times .

“No quería ver a un médico, porque no quería ser parte de las estadísticas de las pruebas de Covid-19”, añadió.

Wallace se volvió famoso en Estados Unidos luego de que, el 4 de julio de 2020, organizó una protesta en la ciudad de San Angelo, Texas, para manifestarse en contra del uso de cubrebocas y las medidas de confinamiento como los cierres de negocios, en medio de la pandemia de coronavirus.

Ese evento marcó el inicio del grupo “San Angelo Freedom Defenders”, cuyo objetivo declarado en Facebook era “educar y capacitar a los ciudadanos para que tomen decisiones informadas sobre la política local, estatal y nacional y para alentarlos a participar activamente en su deber de asegurar los derechos otorgados por Dios y protegidos constitucionalmente”.

Su discurso desató todo tipo de teorías conspirativas que niegan la evidencia científica y alientan peligrosas prácticas. Entre ellas, el rechazo a la eficiencia del cubrebocas como medida de protección contra la circulación del Covid-19.

Fuente: Cronica.com.ar