En el día de ayer Luiz Inacio Lula da Silva no se entregó  en el plazo que había fijado el juez Sergio Moro tras la condena a 12 años y un mes de cárcel por corrupción en Curitiba. Tras pasar la noche en el Sindicato de Metarlúrgicos, habló allí mismo ante una multitud durante una misa en memoria de su esposa Marisa Leticia, quien falleció el año pasado.

"Voy a atender el mandato de prisión", expresó Lula confirmando que posteriormente se entregará a la policía.

"Soy el único ser humano que estoy procesado por un departamento que no es mío. Tengo la conciencia tranquila", dijo.

Lula transformó la misa en un acto de campaña. "No tengo miedo de ellos", dijo. "Me gustaría debatir con [el juez] Moro, me gustaría que me mostrase una prueba", agregó.
 

Esta mañana el juez Edson Fachin rechazó el último recurso de habeas corpus que había presentado la defensa de Lula ayer, que tenía como objetivo suspender la orden de prisión decretada el jueves por el juez Moro.