En plena guerra de Vietnam, su padre Ho Van Thanh decidió refugiarse en la jungla con su pequeño hijo Ho Van Lang quien, durante 41 años, no tuvo contacto con ningún otro ser humano.

Ambos pasaron cuatro décadas viviendo en la selva, usando taparrabos como vestimenta y cazando ratas para comer. 

En 1972, tras el bombardeo estadounidense en su aldea que mató a su esposa y a sus otros hijos, el padre decidió huir y refugiarse en los bosques de Quang Ngai con Ho Van Thanh quien entonces tenía dos años.

Ho Van Thanh creció sin conocer que existían las mujeres ni saber que era el sexo. Tampoco tuvo ningun contacto con el mundo moderno, hasta 2013, donde fueron hallados por unos lugareños.

The Vietnamese Hermit | CAPTURE DAY

Ambos se fueron adaptando lentamente a la civilización y ahora viven en una casa cerca de la jungla.

La dieta de Lang y Thanh consistía en frutas, verduras, miel y una variedad de carnes, incluidos monos, ratas, serpientes, lagartijas, ranas, murciélagos, pájaros y peces. Además, mantenía un fuego encendido y fabricaban herramientas, cubiertos y utensilios de cocina con materiales que encontraban en el bosque.

“Lang vivió los últimos años lleno de estrés y ansiedad, permaneciendo despierto toda la noche en caso de que su padre cayera en la nada”, aseguró un especialista.

Cuando finalmente se encontró a la pareja, Lang fue llevado a un pueblo en un auto y se sorprendió por todos los inventos modernos que presenció. “Por la noche, estaba completamente asombrado por la luz que provenía de las bombillas. Lang nos dijo que poder disfrutar de la luz durante la noche era algo extraordinario. Justo después de eso vio una televisión por primera vez, algo de lo que su padre también le habló cuando era joven”.

Fuente: TN.com.ar