Intentando un cambio de imagen tras las medidas que generaron descontento popular, el gobierno de Mauricio Macri busca sellar acuerdos con los líderes de los bloques parlamentarios, para garantizar gobernabilidad “sin depender exclusivamente de los gobernadores”, fundamentalmente los peronistas.

Quien convoca un almuerzo de senadores con Marcos Peña es Federico Pinedo, presidente provisional del Senado, y su objetivo sería el de sellar acuerdos para avanzar en la aprobación de ciertas leyes y reformas, como la laboral y el Código Penal.
“El jefe de Gabinete quiere invitarlos a un almuerzo el día martes 3 de abril a las 13, en Casa Rosada, para analizar la situación nacional”, reza la convocatoria hecha por Pinedo y enviada por e-mail.

Los anfitriones del evento serán el propio Marcos Peña y el ministro del Interior Rogelio Frigerio. Entre los invitados se encuentran los senadores Miguel Angel Pichetto (PJ), Juan Carlos Romero (Interbloque PJ Federal), Marcelo Fuentes (FpV), Fernando Pino Solanas (Proyecto Sur UNEN), Guillermo Pereyra (MPN), Magdalena Solari Quintana (Frente Renovador de la Concordia), Adolfo Rodríguez Saa (Unidad Justicialista), Luis Naidenoff (UCR), Angel Rozas (UCR), Humberto Schiavoni(Frente Cambiemos), Ada Rosa Del Valle Itúrrez de Cappellini (Frente Cívico por Santiago del Estero) y Daniel Lovera ( Alianza Frente para la Victoria pampeano).

Al parecer, la intención del presidente Macri sería “despegar al poder ejecutivo” de lo que suceda en el Congreso, y que las eventuales negociaciones dentro del recinto, queden a cargo de Emilio Monzó y de Federico Pinedo. Y también, no depender de los gobernadores, para “no estresar más la relación ni depender de ellos para sacar todo”, en relación a las leyes que Macri pidió para este año.

Se intenta, por otra parte, lograr estos consensos, por temor a repetir la crisis política en lo que fue la discusión por la reforma jubilatoria en diciembre de 2017.

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En este plan de consensos, también se incluyen modificaciones a las reformas que no tengan apoyo mayoritario, como es el caso de la primera reforma laboral, de la que sólo presentarán dos proyectos de ley fragmentados en el blanqueo de empleados en negro y la de fomento de pasantías laborales.

Se suma a las intenciones del Ejecutivo, de cara el año próximo a las elecciones, no sólo desligarse de eventuales conflictos con los gobernadores, sino también separar las elecciones provinciales de las nacionales, y negociar en relación al financiamiento de las provincias, coparticipación y cumplimiento –hacia fin de año- del pacto y la ley de responsabilidad fiscal.
En la Casa Rosada creen que los gobernadores van a cumplir con la baja del déficit fiscal y que –mediante el pacto que Macri firmó con los gobernadores excepto con las provincias de San Luis y La Pampa- no aumentarán el empleo público por arriba del crecimiento poblacional.

Siguiendo esta misma línea, el jefe de Gabinete se mostró en un acto en Santa Fé con el gobernador socialista Miguel Lifschitz, en la inauguración de la Central Térmica Timbúes, que aportará 170 megavatios de potencia eléctrica al Sistema Argentino de Interconexión. Debido al enfrentamiento que el gobierno nacional mantiene con el gobernador –por las críticas al plan económico pero fundamentalmente por la deuda de la coparticipación- Marcos Peña transmitió “el saludo del presidente Macri, quien con mucho orgullo pidió que agradeciera toda esta tarea que, en conjunto, se ha logrado acá, y pedirles que sigamos en esta línea trabajando, avanzando y transformando juntos este país”. Y en posteriores declaraciones a la prensa, Peña anunció que "la semana próxima la Nación convocará al gobernador Lifschitz a una reunión en que se le formulará una propuesta formal” por "la deuda que el Estado mantiene con la provincia de Santa Fe” y que “a partir de eso esperamos que se pueda iniciar un proceso de diálogo y un acuerdo”. Por último, afirmó que la economía lleva siete trimestres seguidos de crecimiento, que la cantidad de empleos también viene en aumento y prometió que “la inflación de este año va a ser más baja que la del año anterior y la del año próximo más que la de 2018”.
 

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