Fernán Quirós fue claro: “la curva de casos acumulados siempre va a ir en aumento”. Pero el funcionario porteño pidió mirar los números diarios, los cuales no crecen. A la fecha, la Ciudad tiene cerca de 31.500 positivos, aunque la mayor atención del gobierno está puesta en las camas de terapia intensiva: 236 en uso.

El viernes de la semana que viene termina la nueva etapa en el AMBA. El objetivo de la cuarentena estricta es evitar un salto exponencial en los casos que termine colapsando el sistema sanitario. Y ello, según Quirós, se está cumpliendo: “Todos tenemos la perspectiva, si se cumple la cuarentena, que va a disminuir el contagio”.

“En la Ciudad de Buenos Aires no tenemos aumentos de casos por día”, resumió el ministro, que en conferencia de prensa resaltó que “el AMBA es interdependiente social, económica y políticamente. Más allá de una estrategia integral, siempre tomamos decisiones en la Ciudad con una metodología”.

Para separarse de las decisiones de Provincia, Quirós enumeró que en la Ciudad “priorizamos el comercio barrial, la caminata de los niños y la actividad deportiva nocturna”, actividades que la gestión de Axel Kicillof nunca autorizó. Y si bien es una incógnita que pasará después del viernes 17, el titular de la cartera sanitaria deseó “llegar con la curva controlada y con el R (a cuántas personas infecta cada individuo con el virus activo) lo más bajo de 1, entonces proponerle a la ciudadanía algún cambio a la estrategia que tenemos hoy”.

En boca de Quirós, “la implementación de las decisiones se adapta a las culturas y a las realidades locales, y así va a seguir siendo. Nuestra curva se está estabilizando con sacrificios de salud y económicos”.

“Lo que proponemos y coordinamos en AMBA -agregó- va a surgir de los datos a la vista”.

Si bien la coordinación telefónica entre los tres ministros (Nación, Provincia y Ciudad) es diaria, se espera que el fin de semana se realice un nuevo encuentro entre los equipos para ver la letra fina de los contagios diarios.

La estrategia continúa siendo el aumento de los testeos y aislamiento a quienes estuvieron en contacto estrecho. 

Fuente: Crónica