La semana pasada se conoció una importante noticia: nuestro país fue seleccionada por el laboratorio farmacéutico más grande del mundo para comenzar a testear la vacuna contra el coronavirus.

La vacuna de Pfizer está en fase avanzada clínica ya que pasó las pruebas iniciales de seguridad en Alemania y los Estados Unidos y fue autorizada a avanzar a pruebas de eficacia por la Administración Federal de Drogas (FDA), la agencia del gobierno estadounidense encargada del control de los medicamentos.

En diálogo con Radio Mitre, el médico infectólogo Fernando Polack explicó que “las personas no van a enfermarse por aplicarse la vacuna”.

“Esto es interesante de aclarar, porque no es un coronavirus lo que recibe la persona que se vacuna y esto tiene que ver con los tipos de vacunas que se pueden utilizar -detalló el director de la Fundación Infant-. Las primeras vacunas que recibía el humano eran virus que se volvían más torpes al entrar en contacto con el sistema inmune; después se empezaron a matar a los virus. Se lo puede ‘atontar’ como en el caso de la vacuna contra el sarampión, haciéndolo reproducirse en células animales para que cuando ingrese al cuerpo humano ‘no sepa’ qué hacer”.

Y tras asegurar que “la vacuna prepara al sistema inmune para que arme su defensa ante lo que puede venir”, destacó que lo que hace la actual, que inmuniza contra el SARS-CoV-2 es “pasarle al cuerpo el código genético, la clave para que arme defensas: el cuerpo percibe una pequeña porción de ARN viral, y empieza a generar defensas”.

Por otra parte, Polack indicó que en el estudio de vacunas podrán participar voluntariamente “personas entre 18 y 85 años en su inmensa mayoría, salvo personas que tengan un cáncer en evolución que se estén tratando; casi todo el mundo puede participar, las que no pueden participar son mujeres embarazadas”.

Además, detalló que en el ensayo: “Las personas reciben la vacuna o un placebo. En este caso el placebo es un poco de agua con sal. El tema es ver cuántas de estas personas que recibieron la vacuna se enferman de coronavirus en la vida normal comparado con cuántos de los que recibieron agua con sal. Si la vacuna baja el número de enfermos, para noviembre tendremos una respuesta y se podrá proceder a evaluar esa licencia de la vacuna y suministrar sucesivamente a la población”.

Asimismo, el médico detalló como las personas podrán ofrecerse para ser voluntarios en el estudio:  los interesados deben escribir un mail a info@infant.org.ar y desde allí los derivarán a página web definitiva para inscribirse.

Fuente: Infobae.com