El abogado de la familia de Lucas González, Gregorio Dalbon, comunicó en las últimas horas del domingo que Cintia López, madre del joven asesinado por la Policía de la Ciudad, intentó suicidarse por tercera vez. La mujer fue trasladada a un hospital y se espera su traslado a un centro de salud mental para continuar con su recuperación.

"La madre de Lucas González se cortó las venas con un cúter. La encontró la hija menor. Peca (Héctor) su marido alcanzó a llevarla al Hospital Mi Pueblo Materno Infantil de Florencio Varela. Mañana a primera hora la trasladan", publicó Dalbon en su cuenta de Twitter.

Cerca de la medianoche, el abogado agregó que la mujer se encontraba en "estado crítico" y que este lunes por la mañana, cuando se encuentre estabilizada, van a buscar un centro psiquiátrico para trasladarla. "Les pido a los políticos que ayuden a buscar un lugar para Cintia, ya que se encuentra en un hospital que la sacó de la urgencia, pero NO es psiquiátrico", cerró el abogado.

En declaraciones a Radio La Red, Dalbon reclamó el tratamiento e implementación de una ley de salud mental para "esta gente que queda destruida cuando le matan un hijo". En la misma línea, marcó que en declaraciones públicas Cintia anticipaba: "Me quiero ir con él". En este tercer intento de suicidio, la mujer fue encontrada por su hija menor de 9 años.

Este martes, el abogado brindó detalles de la situación que atraviesa la mujer: “Luego del trabajo de muchos/as ya está Cintia alojada en una Institución Psiquiátrica para su recuperación. Peca, su marido está conteniendo a los chicos y ayudando a Cintia en la Clínica. Estará hasta su estabilización, luego los psiquiatras dispondrán. ”

Tweet de Gregorio Dalbon

El crimen de Lucas González

El crimen de Lucas se registró el 17 de noviembre último, cuando el adolescente y tres amigos salieron de entrenar del club Barracas Central a bordo del Volkswagen Suran del padre de uno de ellos y fueron interceptados por un auto Nissan Tiida de la Brigada de Investigaciones de la Policía de la Ciudad, sin patente ni signos de ser policial, del que bajaron tres efectivos armados y sin identificar.

De acuerdo con las pruebas recabadas, los adolescentes creyeron que eran ladrones que iban a robarles, por lo que huyeron del lugar, momento en que los policías les dispararon desde distintos ángulos. Al menos cinco tiros dieron en el auto y uno de ellos impactó en la cabeza de Lucas, quien horas más tarde murió. 

Fuente: Página12.com.ar