Testigos del hecho afirman que el niño encontró la tarjeta SUBE en el piso en la puerta de un kiosco, la tomó y se fue corriendo.

En ese momento, los policías lo detuvieron, redujeron y esposaron para llevarlo, posteriormente, detenido.

La situación fue captada por uno de los vecinos y rápidamente subida a las redes sociales.

Cabe recordar que los efectivos no pueden accionar de este modo con un menor.