Marcelo Urbano busca conocer su identidad desde los 12 años y pudo confirmar que es hijo de un millonario empresario que vive en Buenos Aires. Sin embargo, el magnate le negó la paternidad, a pesar de que dos ADN ratificaron que es su papá biológico.

Urbano, de 58 años, vive en el municipio de Villa del Soto, provincia de Córdoba y de acuerdo a su propio testimonio, supo que su madre, ya fallecida, trabajaba en la década de los 60 como empleada doméstica en la casa de la familia Lapania, en la ciudad de La Falda.

Según contó Urbano a El Show del Lagarto, su mamá tenía 19 años cuando quedó embarazada por uno de los hijos del dueño de la casa en la que trabajaba como empleada doméstica. “Fue una relación sin consentimiento”, aseguró Urbano. Por este hecho, la despidieron. Pero antes de que su mamá muriera, ella le dijo que su papá era Eduardo Lapania, actual director de Bodegas Don Cristóbal. A sus 21 años, logró reunirse en Buenos Aires en un bar con su verdadero padre, quien negó el vínculo y desestimó la versión del joven.

"Marcelo ha sufrido muchas carencias y miserias en toda su vida, vive de changas y es albañil en contraste con este padre y sus hermanos que han accedido a una mejor educación, idiomas y viajes constantes alrededor del mundo", expresó el abogador defensor, Federico Crucella.

Desde entonces, se inició el reclamo por vía judicial, se realizó dos ADN que dieron positivo y, según la resolución de un juez, “debe llamarse Marcelo Omar Urbano Lapania”. Crucella, explicó que iniciarán un reclamo económico por daños y perjuicios por al menos 100 millones de pesos.

Fuente: C5N.com.