La Policía Federal investiga tras descubrirse la profanación de las tumbas y robo de al menos dos cuerpos de bebés del cementerio de General Alvarado, Miramar. La principal hipótesis de los investigadores indica que se trataría de una secta.

El pasado lunes se confirmó que el cadáver de Liam Rodríguez (2) fue sustraído de su tumba en el cementerio de Miramar. Su desaparición se descubrió durante la búsqueda de los restos de Ciro Lescano, de 4 meses. Los casos se suman a los registrados en la localidad de Nicanor Otamendi, en el mismo partido, y totalizan cuatro desde el año 2017.

El secretario de Seguridad de la Nación, Eugenio Burzaco aseguró que este tipo de profanaciones "muchas veces tienen que ver con cultos irregulares".

Burzaco dijo que "es importante investigar" estos casos y que pondrán a disposición de la Policía provincial y de la Justicia departamental "perros especializados tanto en cuestiones de drogas como en temas cadavéricos". 

"Estamos colaborando con las fuerzas federales para tratar de ver quiénes están detrás de estos hechos lamentables y tratar de desarraigar estas organizaciones criminales", apuntó.

Por el caso de Liam se dispondrán rastrillajes en las inmediaciones del cementerio, tal como sucedió con el caso de Ciro Lescano. Durante aquel rastrillaje se encontraron prendas que pertenecían a Liam, lo que permitió descubrir esta nueva profanación.

En el año 2017 se habían registrado dos casos similares en la localidad vecina de Nicanor Otamendi: el primero de ellos fue el Matías Valentino Fernández (1), cuyo cuerpo había sido hallado mutilado a la vera de la ruta 11, y nueve meses más tarde se denunció la desaparición del cadáver de Ciro Aranda (1).

Fuente: Diario Veloz