Los cuerpos de dos mujeres fueron encontrados ayer en un profundo pozo del patio de una casa de la ciudad de Córdoba tras una serie de excavaciones que se iniciaron ayer, luego de que el hijo de una de ellas y otro joven confesaron que las habían descuartizado y arrojado allí. Se harán nuevas excavaciones. 

Ayer por la mañana se produjo un primer hallazgo en la vivienda situada en Oscar Cabalén al 6500, en el barrio Autódromo de la capital cordobesa, y en las primeras horas de la tarde se dio con el segundo cadáver.

Ismael Castro (20) y Esteban Castro (24), uno de los cuales es hijo de una de las víctimas y el otro hermano o primo de éste, confesaron la autoría del hecho y permanecen detenidos por el "doble homicidio calificado" de Esther Castro (41) y Sara Castro (39).

Un perro marcó otro pozo, en el que los investigadores encontraron el lunes unas herramientas enterradas. Según informó Cadena 3, los investigadores sospechan que esté enterrado el padre de las víctimas, "Don Castro", quien está desaparecido hace un tiempo.

Así lo dispuso la fiscal de Violencia Familiar de Córdoba a cargo de la causa, Andrea Martín, quien investiga el doble crimen de las hermanas Esther y Sara, quienes residían en esa casa y fueron vistas con vida por última vez hacía más de una semana.

De acuerdo a los primeros datos de la investigación que lleva adelante la fiscal Martín, los femicidios habrían ocurrido el sábado 24 de septiembre pasado, por motivos que aún se desconocen, aunque se cree que se produjo en el marco de una discusión.

El jefe de DUAR, Sergio Cravero, contó los detalles técnicos del complicado lugar donde debieron actuar los brigadistas: "Este pozo presenta ciertas dificultades, y es que tiene más de 50 metros de profundidad".

"Presenta una curva entre los 25 y 30 metros, por eso las tareas debieron ser prolijas, el personal que bajó lo hizo con indumentaria apropiada y con equipos de respiración autónomos, que le permite, aproximadamente unos 45 minutos a cada personal que ingresa", completó.

Ayer, los efectivos habían encontrado en el pozo bolsones que contenían ropa, documentación y carcasas de celulares, mientras que en el interior de la vivienda encontraron palas, machetes, hachas y una maza que tendría manchas de sangre.

Todos los elementos fueron remitidos a una sede pericial para ser analizados y establecer si efectivamente están manchados con sangre humana y, en ese caso, si pertenecen a las hermanas Castro.

A su vez, los cuerpos fueron remitidos a la morgue judicial con el fin de ser sometidos a la autopsia que permitirá determinar las causas de la muerte y confirmar la identidad de ambas.

El Ministerio Público Fiscal también ordenó la detención de una adolescente de 17 años por supuesto "encubrimiento" del hecho, el cual comenzó a investigarse el sábado pasado. Ese día, los dos jóvenes de apellido Castro fueron interceptados por una patrulla policial cuando caminaban por la ruta de la Altas Cumbres acompañados de cuatro menores de edad. En ese grupo había un bebé de un año, dos niños de 6 y 12; y una adolescente de 17.

El menor de los Castro confesó que junto al otro joven había asesinado a su mamá y a su tía, descuartizado y enterrados los cuerpos. Ante esta situación, la fiscal Martín dispuso la detención y los imputó de "delito de "doble homicidio calificado".

De acuerdo a algunos habitantes de la cuadra, en el domicilio investigado convivían "varias personas de una misma familia", a las que describieron como "muy raras" ya que "no mantenían contacto social, vivían encerrados y aparentemente practicaban algún rito religioso extraño".

Fuente: Minuto Uno