¿Jorge Ibáñez y Graciela Alfano fingieron un noviazgo por la herencia?

A seis años de la muerte de Jorge Ibáñez, surgió una increíble revelación que hizo Graciela Alfano este martes en Confrontados. La actriz contó que la familia del diseñador de moda le hizo creer al abuelo materno –padre de Mabel Ibáñez, que hoy enfrenta un litigio legal con su hija por la herencia de su hijo fallecido– que eran pareja.

Quien dio la primera información fue Franco Torchia: “Ese abuelo estuvo convencido durante mucho tiempo de que Graciela era la novia de Jorge, que era su compañera, su conquista, la persona que su nieto varón había logrado levantarse. De alguna manera, había un consenso familiar de no quebrarle la ilusión a ese hombre”, sostuvo el panelista del ciclo de El Nueve.

El periodista también indicó que el abuelo de Jorge antes de morir le “habría otorgado un plus de herencia a Jorge porque así se lo pedía Mabel" influenciado por la relación que le habían hecho creer. “Graciela se prestó hasta cierto límite y después dejó de prestarse”, agregó Torchia, y continuó: “Habría habido un momento en el que Mabel Ibáñez habría forzado a su hijo, Jorge, una vez que Graciela ya estaba con Matías Alé, a ir a ver a su abuelo como novios, para garantizar ese plus de herencia”.

Mientras tanto, Graciela Alfano, que estaba conectada a través de una videollamada desde su casa, asentía con su cabeza. Sin embargo, cuando tomó la palabra, aclaró que ella no estaba al tanto del trasfondo económico que había detrás.

“El abuelo de Jorge creía que yo era la novia. Muchísimas veces me venía a ver al teatro de revistas y nos sacábamos una foto: Jorge de un lado y el abuelo del otro, y el abuelo comentaba: ‘La carne que estás tocando’. Nos mirábamos con Jorge y nos reíamos, era una cosa muy graciosa, pero el señor hablaba en serio", contó la ex vedette.

“Cerraba los desfiles vestida de novia. Jorge salía del otro lado y nos reuníamos en el medio de la pasarela y nos dábamos un piquito. El señor (por su abuelo) aplaudía, estaba en el mejor de los mundos”, siguió Alfano sobre las distintas anécdotas que vivió con el abuelo de Jorge Ibáñez.

Alfano contó que la mentira duró seis años, desde 1994 hasta 1999, cuando ella comenzó su relación con Matías Alé. Durante ese tiempo, el abuelo tenía la ilusión de que su nieto y la entonces conductora de El Periscopio –ciclo que conducía con Carlos Monti por la pantalla de América– se casaran. “Jorge te va a hacer el vestido más lindo del mundo, va a ser el novio más lindo. Yo quiero verlo. Voy a poner toda la plata para la fiesta, que va a ser la mejor, y yo voy a estar ahí”, le dijo.

“A mí me daba cosita pincharle el globo a un señor que estaba grande –en aquel entonces tenía 90 años–, le seguía el tren, y evidentemente se lo creía. Él creía que nos íbamos a casar", explicó Alfano, y reprodujo el diálogo que mantuvo con Ibáñez cuando le planteó sus sospechas.

—Se va a dar cuenta.

—No, porque mi mamá está contenta porque mi abuelo está contento.

“Pero a mí me daba cosita porque estamos pasando por esto que deja de ser un chiste para empezar a ser algo pesado. Una negación de identidad”, agregó Alfano sobre la historia que le inventó Mabel Ibáñez a su padre.

Con respecto al trasfondo económico, la ex vedette contó que “el abuelo tenía una billetera importante” y que había sido él quien invirtió para que Jorge Ibáñez abriera su local. “Le daba todos los gustos a su nieto porque lo adoraba. Bancó mucho a Jorge en sus comienzos”.

“Yo no me di cuenta de que era una maniobra, mucho menos que era un tema económico. No me hubiera prestado si era para eso porque era algo muy irresponsable de mi parte entrar en ese esquema maquiavélico para sacarle plata al abuelo. Pero la señora (por Mabel Ibáñez) era muy manipuladora en esa relación”, dijo la ex vedette.

“Yo no veía ninguna firma de cheques, y no sabía que era para eso. Yo me prestaba porque me parecía que era una ilusión para este señor, en una familia con un sello homofóbico. Porque si no, ¿por qué vas a inventar un romance? Esto fue durante 1994, 1995, 1996, 1997, 1998 y 1999. Fueron seis años, no fueron 10 minutos...”, concluyó Graciela Alfano.

Fuente: Infobae