El encargado de sucederlo fue Sebastián Alejandro Battaglia, estrenando su título de director técnico.

Su registro es tan breve como exitoso: debutó en Córdoba con un empate ante Instituto 0 a 0. Y a continuación encadenó tres victorias al hilo: Juventud Unida (3 a 0), Agropecuario (2 a 0) y Flandria (2 a 1).

Aprovechó Battaglia una semana extra para trabajar ya que Almagro tenía fecha libre ese fin de semana. El equipo estaba un punto debajo de los entonces líderes Aldosivi y Atlético de Rafaela. "Es un situación rara porque nos toca entrar en un equipo que está funcionando muy bien. No vamos a hacer grandes cambios. La idea es acompañar lo que se viene haciendo y potenciarlo, corrigiendo algunos errores que veamos", fueron sus primeras declaraciones.

"Cuando uno agarra un equipo piensa en hacer las cosas bien y buscar lo mejor. Por suerte las cosas se dieron y nos toca estar arriba de todo", declaró Battaglia el pasado fin de semana. El ex volante de Boca destacó: "Las ganas que están poniendo estos jugadores me enorgullecen. Es tremendo el esfuerzo que hacen".

Como futbolista, Battaglia alcanzó un récord en el club donde se formó y que lo tiene como uno de sus ídolos: salió campeón con Boca en 17 oportunidades. Volante central combativo y criterioso, debió cortar su carrera de jugador a los 32 años debido a una serie de lesiones. En Almagro está dando sus primeros pasos como entrenador.