Al margen de haberse quedado en la puerta de la clasificación a la Libertadores 2019 a través de la Superliga y no poder cumplir ese objetivo que se había trazado a principios de año, para River el primer semestre de 2018 fue muy bueno. Es que las otras dos metas fueron cumplidas.

La primera de ella, la de ir por la "zanahoria", tal como lo definió Marcelo Gallardo dejó un recuerdo imborrable para los hinchas millonarios -y también para los de la otra vereda-: el triunfo sobre Boca en la final de la Supercopa Argentina que se disputó el 14 de marzo en Mendoza.

A partir de allí, River consiguió más del 90 por ciento de los puntos, tuvo una gran remontada en el torneo local y pudo cumplir con creces el otro objetivo: a falta de una fecha para que finalice la fase de grupos se metió en los octavos de final de la Copa Libertadores. En el último encuentro, que será contra Flamengo, el miércoles en el Monumental, buscará asegurarse el primer puesto de la zona D. Con un empate le alcanza.

De esta manera, River llegó con cierta tranquilidad al final del semestre, ya tiene planificada la pretemporada (será en Orlando desde fines de junio hasta mitad de julio, con amistosos incluidos) y en el segundo semestre apostará todos los cañones a conseguir la actual edición de la Libertadores y el tricampeonato en la Copa Argentina.

¿Necesitará más refuerzos para hacerlo? En principio, y dependiendo de lo que suceda con las ventas, la idea sería traer no más de dos jugadores. Y esos futbolistas apuntan sobre todo al mediocampo, teniendo en cuenta que Gonzalo Martínez e Ignacio Fernández pueden llegar a ser buscados por el mercado europeo.

Uno de los nombres que surgió y que sería del agrado del entrenador es el de un ex Boca que tuvo un gran campeonato en Godoy Cruz, subcampeón de la Superliga. Se trata de Guillermo "Pol" Fernández, un volante ofensivo de 26 años que juega delante de los mediocampistas centrales en el conjunto mendocino y a veces arranca tirado a la izquierda. Es uno de esos jugadores que puede ofrecer variantes en el mediocampo tal como le gusta al Muñeco.

Otros dos nombres que vienen apareciendo en los libros de pases son dos conocidos, que fueron campeones de América en 2015: Carlos Sánchez y Leonel Vangioni. Sin embargo, el hecho de no haberse ido bien les resta puntos. Para tenerlos en consideración de volver, según aclararon desde River, deberían hacerlo en condición de libres, tal como dejaron el club.

Después, por el momento no hay mucho más ya que River, en general, está bien cubierto en la mayoría de los puestos. Quizás el lateral derecho esté en duda, pero ya está para volver el paraguayo Jorge Moreira. En tanto, Rodrigo Mora, a quien se le vence el contrato en junio, renovará por dos años más. Y habrá que ver que pasa con Enrique Bologna, uno de los arquero suplentes, a quien también se le culmina el vínculo y quedaría libre.

Por otro lado, River tiene recambio, algo que no era habitual en los últimos años. Para ello, se hizo una gran inversión en los últimos dos mercados de pases. En total gastó más de alrededor de 42 millones de dólares. Lo hizo pensando en estar bien preparado para el segundo semestre de este 2018.

En julio del año pasado River contrató a Germán Lux (libre), Javier Pinola (3 millones de dólares), Marcelo Saracchi (1,9 millones de dólares), Enzo Pérez (4 millones de dólares), Ignacio Scocco (3 millones de dólares), Nicolás De La Cruz (4 millones de dólares por el 30% del pase) y Rafael Santos Borré (4 millones de dólares por el 50% del pase).

Y en enero rompió el mercado con la contratación más cara de la historia del club, la de Lucas Pratto (cerca de 14 millones de dólares). También trajo a Franco Armani (4 millones de dólares), Bruno Zuculini (3,8 millones de dólares) y Juan Fernando Quintero (préstamo de 300 mil dólares).

Fuente: Clarín deportes