"Un gran actor que se va": Inmenso dolor en el cine internacional por la muerte del actor mexicano recordado por su papel en "crimen del padre Amaro", Fernando Becerril

Este martes, 7 de febrero, se dio a conocer que el primer actor, productor y director Fernando Becerril falleció a sus 78 años.

La Asociación Nacional de Actores (ANDA) y la Secretaría de Cultura dieron a conocer el fallecimiento del histrión, aunque sin dar a conocer las causas.

Emiliano Becerril, sobrino del potosino, confirmó la muerte de su pariente a través de sus redes sociales con el mensaje: “Falleció mi querido y adorado tío Nando, Fernando Becerril Straffon, un gran actor que se va”.

Becerril es recordado por su trabajo en teatro, cine y la televisión por producciones como El crimen del padre Amaro, Drama/Mex, Tlatelolco, verano del 68 y La leyenda del Zorro.

Algunos de los últimos trabajos que hizo fue en La venganza de las Juanas como Rogelio Marroquín, El baile de los 41 como Porfirio Díaz y El habitante, como Pedro Natale.

A pesar de que en los últimos años se alejó de la pantalla, participó activamente en el proyecto Leo... luego existo del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL).

Fernando Becerril nació en San Luis Potosí, pero creció en Cuernavaca, Morelos, donde se dio cuenta de su pasión por estar en el escenario siendo parte de un coro. Después, en la Ciudad de México, comenzó a actuar a los 15 años en la Preparatoria 5 “José Vasconcelos”. Entró a la entonces Escuela de Teatro de Bellas Artes, donde formalmente comenzó sus estudios.

Gracias a su talento en la actuación, a los 25 años solicitó y obtuvo una beca del gobierno de Francia para estudiar en aquel país, donde perfeccionó sus dotes en el teatro.

En París, el actor vivió por más de 20 años, pero decidió regresar a México en 1995 para actuar en una película, contratado como talento francés. Pese a que su carrera en Europa estaba teniendo éxito, se quedó en México porque la nostalgia de regresar a su tierra natal fue muy fuerte y, además, porque hizo diferentes castings y obtuvo los personajes que quería. Desde entonces, a partir de sus 50 años, en México se dedicó a su pasión, el teatro, pero también al cine y la televisión.

Su trabajo por impulsar el teatro se reflejó en las decenas de obras en las que participó y en aquellas en las que colaboró desde la producción, algunas de ellas fueron Muerte Parcial: Un plato difícil, El mercader de Venecia, La comedia de las equivocaciones, Sueño de una noche de verano, entre otras.

Becerril estaba convencido que en México existía el talento y la calidad para que el cine pudiera triunfar a nivel internacional; sin embargo, existía poca “protección” para los productores y actores, además de que a nivel cultural existía la costumbre de preferir el cine estadounidense.

Fuente: Infobae.com