A pesar de que Magnolia Vicuña ya tiene 5 años, recién ahora su mamá, Eugenia China Suárez, abrió su corazón en una charla virtual y reveló el delicado problema que atravesó la nena cuando apenas tenía 3 meses de vida, por el que llegaron a plantearle la posibilidad de un trasplante de riñón.

La primera de los dos hijos que tuvo con el chileno Benjamín Vicuña debió vivir durante todo un año bajo un estricto tratamiento luego de una infección urinaria que permitió detectar un problema renal de la beba, que podría haberla llevado a una operación o hasta un trasplante.

Desde un vivo de Instagram, la China Suárez contó que tras nacer, tuvo que ir corriendo a la guardia al ver la intensa fiebre de la beba. “La llevamos a la madrugada, y me dicen ‘cuando tienen fiebre tan alta, antes de los tres meses, hay que dejarlos internados en observación’. Me pareció bien. Hasta ahí estaba todo bien”, comenzó relatando.

Al tiempo que siguió: “En la clínica viene una de las enfermeras, después de hacerle estudios de sangre a Magnolia, y me dice ‘hay una opción de que sea meningitis’”. Y confesó que automáticamente al googlear empezó a leer y llorar. "Casi me muero", confesó.

El problema renal de Magnolia, la hija de la China Suárez y Benjamín Vicuña

Asimismo, detalló: “Estuvo internada una semana. No se enteró nadie. A la semana nos dicen que era una infección urinaria, gracias a Dios. Seguimos con los estudios y vamos con el mejor nefrólogo... Le hicieron hasta una punción lumbar”.

Allí reveló que el especialista les explicó que la beba había nacido "con la tapita que filtra el pis de la vejiga a los riñones fallada, vencida". Por lo que les informó que Magnolia iba a "necesitar que al año le hagamos una operación, porque si no va a necesitar un trasplante de riñón”.

Así, la ex de Vicuña contó que durante todo un año debieron "darle antibióticos todos los días para que no tuviera de nueva infección urinaria”. Así como también aseguró que siempre tuvo fe y supo que su hija se curaría. “Al año le hicimos los estudios y se le había curado. Era reflujo vesicoureteral. Fue muy fuerte. Pero es una cuestión de fe, para mí. Y de médicos, obviamente, porque no sé qué haríamos sin los médicos”, confió ahora cuando aquel episodio quedó ya superado por completo.

“Fue muy fuerte lo de Magnolia. Creo que fue de los peores momentos de mi vida. Y no lo sabe casi nadie”, cerró tajante su confesión ante los más de 11 internautas que la escuchaban atentos.

Fuente: Primicias Ya