Hace pocos días se conoció la noticia: a través de un decreto, Mauricio Macri decidió ponerle punto final al programa Conectar Igualdad, que entregó, en cinco años, más de cinco millones de computadoras a alumnos de escuelas públicas.

De todas maneras, previo a su cierre, el Gobierno había dado indicios de sus intenciones, vaciando el programa, reduciendo drásticamente la cantidad de equipos que eran entregados y despidiendo a parte del personal que daba apoyo, además de una quita constante en el presupuesto.

En este contexto, fue que un alumno de La Plata se dirigió a la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, con absoluta honestidad, y pidió: “Que le devuelvan las computadoras a los de Primer Año”, pedido que, era de esperarse, no fue ni siquiera respondido.