Zackrydz Rodzi, es el estudiante malayo protagonista de esta historia. Una mañana despertó y descubrió que no tenía su celular pero no había indicios de que alguien hubiera forzado la entrada y robado en su cabaña. Lo único que halló fue la funda de su smartphone tirada debajo de su cama.

Su padre había visto merodeando en las inmediaciones de su hogar a un mono y le pareció algo extraño. Por esta razón, Zackrydz decidió lanzarse en la búsqueda de su dispositivo. Se adentró en la selva y gracias a la ayuda de su hermano, llamaron a su celular y lo encontraron tirado cubierto de barro.

Para sorpresa de él, cuando se puso a revisar la galería de imágenes de su aparato descubrió que el simio se había fotografiado en modo selfie.

A pesar de que la mayoría de las instantáneas están borrosas, en algunas se puede ver claramente la cara del mono y en los videos que grabó mientras estaba trepado a un árbol se alcanza a observar que trata de comerse el aparato como si fuera un alimento.

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Fuente: mdzol.com/