La empresa Sudamericana S.A. será la encargada de hacer los edificios deportivos en el barrio de Lugano. No es la primera vez que el gobierno le adjudica jugosas contrataciones, para los Juegos Olímpicos de la Juventud que se devoraron más de 500 millones de dólares, la empresa de chileno Rudi Boggiano Leupolt, que integra el Foro de Desarrollo Urbano, que asesora al Gobierno porteño, fue la encargada de hacer viviendas y los pabellones multipropósitos A 1 y A2, además recibió obras en la Villa 31.

Según se publicó en el Boletín Oficial a través de la Resolución N° 135/MDUYTGC/19,  Sudamericana S.A se adjudicó la obra que generó polémica en el barrio de Nuñez, ya que la misma, que lleva la firma del ministro Franco Moccia, da por hecho el traslado del Centro Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (CENARD) a la Comuna 8 ubicada en el sur de la Ciudad.

Mientras se llevaban a cabo las obras para los JJOO de la Juventud, desde el Consejo Consultivo de la Comuna 8 expresaron que "los vecinos sienten que a Soldati, que es el barrio más postergado de la Ciudad, nunca llegan las promesas de Larreta". Es que según relataron desde el barrio hay "graves problemas de inseguridad, y se sumó el traslado de la comisaría N° 36, que mudaron al frente de la Villa Olímpica”.

"Muchas veces, el Gobierno construye cosas que no nos resuelven la vida cotidiana, y la Villa Olímpica es un fiel ejemplo. Tenemos problemas de vacantes. En el mismo predio de la Villa Olímpica, hay un hospital que no se terminó en diez años (aunque desde el Gobierno aseguran que, a finales del 2019, culminarán las obras) y la basura desborda las calles de los barrios. Todo lo que hacen es un maquillaje", sostuvo un vecino indignado a este medio.

Entre las principales denuncias, salió a la luz el mal estado del complejo habitacional de Villa Soldati. El Gobierno invirtió en pintar por fuera el histórico edificio con dibujos de los Juegos Olímpicos, pero si se recorre el complejo ubicado en Lacarra al 2400, se ve que hay una playa judicial totalmente desbordada de autos, que además se extiende a la playa de estacionamiento que pertenece a los vecinos que viven en el complejo. A todo esto, se suma que a los vecinos se les corta el agua a menudo. 

Fuente:Revistaque