La inflación y paritarias en baja perjudican al comprador mientras el IVA al papel y las importaciones preocupan a los productores. La crisis también golpea al mundo editorial, uno de los pilares de las Industrias Culturales que por más “feria exitosa” que tenga sigue estando débil.

“La Feria tiene un microclima distinto de lo que pasa en la industria editorial. Tener una buena feria no es sinónimo de que el mercado está bien”, aseguró el titular de la Fundación el Libro, Martín Gremmelspacher, en diálogo con la agencia AUNO.

Para Gremmelspacher, la producción es “crítica” y explicó que en los últimos dos años “el sector perdió 30 por ciento de su facturación”. Y aclaró que si bien las jornadas profesionales en la Feria de este año “fueron mejores”, porque se despacharon 27 toneladas de libros tanto a nivel nacional como al extranjero, entre los pasillos de la feria se habla para este año una temporada “dispar”.

Por otra parte, todos insisten con que la Argentina trata de mantener un “equilibrio” entre las importaciones y exportaciones pero, según Fundación El Libro, lo cierto es que las exportaciones “no crecen y están estancadas” mientras las importaciones van en aumento.