La historia tiene como centro al partido de Morón, en el año 1988, momento en el que Juan Carlos Rousselot, quien era por aquel entonces el intendente de Morón, firmara un convenio con la empresa perteneciente a la familia Macri SIDECO, para un tendido de cloacas en dicho partido.

Quien era el encargado de llevar adelante la gestión, era nada más y nada menos que Mauricio Macri, hijo del empresario Franco Macri.

El convenio firmado, que tenía como finalidad proveer sistemas de cloacas y desagües, implicaba una inversión de SIDECO por 20 millones de dólares y un eventual reembolso de 140 millones, valores de aquella época. Como garantes de la obra quedaban los vecinos de Morón por un término de 22 años.

Al poco tiempo de conocido el proyecto, comenzaron las denuncias por irregularidades y las sospechas de corrupción respecto a la firma del acuerdo, lo que derivó en el rechazo del mismo por parte del Concejo Deliberante, apenas 70 días después de su firma.

Las denuncias estaban realizadas alrededor del valor de dicha obra, del costo final de los trabajos que implicaba, de las tarifas que deberían pagar los vecinos en caso de querer recibir el beneficio, de la rapidez del proceso de contratación, de la falta de un concurso de ofertas para llevar a cabo la obra y del dinero que había quedado en el camino.

El rechazo de dicho acuerdo derivó en un escándalo que llegó a las tapas de los diarios en aquel entonces, y que llevó, finalmente, a la destitución de quien fuera el intendente, Rousselot.

La participación de Margarita Stolbizer refiere a que, en ese momento, era concejal por la Unión Cívica Radical, y fue una de las personas que votó a favor del acuerdo Macri-Rousselot e, incluso, se opusó a la destitución del intendente, defendiéndolo aún pese a las denuncias de corrupción que pesaban sobre él.

Es interesante resaltar también que Julián Rousselot, hijo de Juan Carlos, es hoy por hoy Director de Tecnología en el Ministerio de Medio Ambiente que dirige Sergio Bergman.