La lucha de los trabajadores del Instituto Nacional de Tecnología Industrial, más conocido por su sigla: INTI, no para y eso tiene sus frutos: luego de enfrentar la represión de los policías de la Federal y la Ciudad de Buenos Aires, bancarse la militarización de la sede donde trabajaban y todas las presiones que reciben, lograron que uno de los delegados echados ilegalmente retome sus tareas.

Daniel “Pollo” Luna, quien integraba la lista de 258 despedidos por la gestión de Javier Ibañez, fue reinstalado en su puesto por una disposición judicial que hizo lugar a una cautelar presentada por los trabajadores en lucha.

El fallo se suma a otra decena y media de reinstalaciones por vía judicial y, como destacó la Agrupación Naranja en su comunicado oficial, “reafirmó lo que los trabajadores venimos señalando hace 92 días: que los despidos se enmarcan en un proceso de persecución política, ataque sindical y amedrentamiento desarrollado por las autoridades del INTI, con el fin de liberarse el camino para continuar con su plan de ajuste y proceder a la privatización del Instituto”.

La gestión de Ibañez, quien hace alrededor de un mes abrió una falsa “mesa de negociación” sin dar respuesta alguna a los reclamos, continúa las provocaciones contra los estatales, con la presencia de uniformados en la sede central y el reciente desplazamiento de directores afines a la lucha.