Vecinos de la ciudad de Corrientes vivieron un extraño y escalofriante hecho. Tras analizar detalladamente el video, llegaron a la conclusión que la criatura que caminó por las calles del barrio sería una lobizón, un ser mitológico de la cultura guaraní.

La terrorífica aparición ocurrió el pasado 10 de abril a la madrugada en el barrio Dr. Montaña, ubicado en el centro de la capital correntina. Según relataron medios locales, un vecino escuchó un extraño ruido y al salir de su casa logró captar con su  celular, entre el miedo y el asombro, las espeluznantes imágenes.

el lobizón en corrientes

En el breve video se puede notar perfectamente la silueta de algo que se asemeja a la criatura mitológica caminando tranquilamente. Y aunque los más escépticos sostuvieron que se trataba de un perro, la mayoría de los vecinos aseguraron que efectivamente es un lobizón, debido a su estatura y sus patas delgadas.

Esta nueva aparición causó terror en el pueblo correntino porque no es la primera vez que registran la presencia de una criatura como esta. En 2021, también se viralizaron algunas imágenes donde se podía ver a un ser similar, pero sin vida. En aquel momento, muchos aseguraron que el supuesto lobizón había sido asesinado por un cazador en Santo Tomé. Mientras que otros detallaron que el animal legendario en realidad fue atropellado por un camión en Itá Ibaté.

La historia del lobizón en Argentina

El lobizón, también conocido como Luisón entre los guaranís, es el séptimo y último hijo de Taú y Keraná, en quien recayó la mayor maldición que pesaba sobre sus progenitores. Además es conocido como el equivalente sudamericano del "hombre lobo" europeo.

De acuerdo a los expertos en el pueblo originario.su solo nombre aterroriza y se halla ubicado en la encrucijada de los caminos de la vida y de la muerte. Los guaraníes sostienen que no hay mayor desgracia que ésta, por lo que huyen de él.

Según las descripciones, es feo, de cabellos largos y sucios, posee una palidez mortal y olor fétido que causa repugnancia entre los que lo tienen cerca. Sus dominios son los cementerios, pues se alimenta de los restos de los difuntos, y se lo puede escuchar  las noches de luna llena, cuando emite sus aterrorizadores aullidos sobre las tumbas.

Al comenzar las sombras de la noche, Luisón pierde sus formas humanas para transformarse en un perro de horrible aspecto con dientes afilados de diferentes tamaños, sus extremidades son mitad humanas, mitad garras. Y con las primeras luces del nuevo día, retornan sus formas humanas y regresa a sus ocupaciones, donde se lo ve sucio, cansado y esquivo.

Fuente: El Destape