Julio Manuel Méndez, quien fue uno de los primeros civiles juzgados y condenado por delitos de lesa humanidad, fue visto viajando en un micro de larga distancia desde Buenos Aires hasta Tandil, ciudad donde goza de los beneficios de la prisión domiciliaria.

Méndez fue condenado en el juicio por el secuestro, torturas y asesinato del abogado Carlos Moreno en 1977. El genocida  puso a disposición su quinta en Tandil para que allí funcione un centro clandestino de represión.

Quien descubrió que Méndez estaba violando la prisión domiciliaria es la periodista y escritora Ivy Cangaro, que también se encontraba a bordo del ómnibus.

Cangaro fotografió in fraganti a Méndez y luego cotejo las fotografías para asegurarse de que se trataba del genocida. La periodista llevó las pruebas a la Justicia y relató el siniestro suceso en el portal Pájaro Rojo.

"Efectivamente, quien viajaba en el asiento 21 de la empresa El Cóndor-La Estrella que partió de Retiro el jueves 1 de marzo de 2018 a las 13:45 era Julio Méndez, acompañado de su esposa y un amigo. Quien tendría que estar preso, y goza de prisión domiciliaria, además viaja como un pasajero más, impune, libre, desafiante, oscuro. Compartiendo tiempo y espacio con decenas de personas que no saben que ese viejito del asiento de al lado es un criminal", escribió la periodista.

Fuente: http://pajarorojo.com.ar